Dx: planes frustrados

Después de largas sesiones de terapia y medicamentos contra y para, ayer mi esposo y yo visitamos por cuarta vez el consultorio del Dr. Larios.
Sentadito y con la paciencia que lo identifica, nos dijo lo que ya sabíamos que tenía en mente desde la primera cita: hay que abrir.
Así que, cuando pensaba que en un futuro no muy lejano me liquidarían y yo me iría al extranjero por una semana con mis compañera y compraríamos baratijas y comeríamos de a montones en bufets, tengo que darme tremenda sacudida para posponer mis planes y hacerme ala idea de que pasare tres meses en donde tendré que tomar las riendas de mi casa (ya lo hago pero pa que crea) y sacarla adelante mientras su “rodilla deportiva” se recupera.
Y yo hacerme ala idea de que la liquidación se me ira de las manos y los único paseitos frecuentes que daré serán: llevarle el cómodo ala cama cada que lo requiera.