Manteca, grasa, manteca.
No se porque demonios mi cara se ha llenado últimamente de manteca. Me levanto y manteca, salgo de la casa ya con manteca. En pilates, mas manteca. Ahorita mismo, manteca.
Mientras cocino… bueno, ya el aceite no es indispensable en mi cocina, ni ocuparía lubricante al tratar de insertar un supositorio.
Manteca, grasa, manteca.
Esto detener el cutis graso, es mas incomodo que tratar de cumplir una jornada laboral, con tanga puesta.
Bueno no tanto, bueno, si, bueno no.
Mientras cocino… bueno, ya el aceite no es indispensable en mi cocina, ni ocuparía lubricante al tratar de insertar un supositorio.
Manteca, grasa, manteca.
Esto detener el cutis graso, es mas incomodo que tratar de cumplir una jornada laboral, con tanga puesta.
Bueno no tanto, bueno, si, bueno no.
5 Comments:
Aaajajaja te pasas, Ara. Quien no te conoce pensaría que eres una doñona mantecosa.
Déjate de cosas y pásate un kleenex, además el cutis graso retrasa la aparición de arrugas.
"Una jornada laboral con tanga" ja ja ja ja qué gracioso. Las tangas me parecen tribales, demasido tribales. Un beso y déjate de cosas.
Juaaaa, jajaja, te imaginás si fuéramos de tanga a trabajar? mortal, para mi seria imposible!!. Una, me parto de frioooo, otra, me parto de verguenza, otra ... qué se yo!!. Che, manteca para el cutis? Vos tas loca? Besos.
Que tienen de malo las tangas en el ambiente laboral? Nadie me ha reclamado nada hasta ahora... eso sí, corro y desconfío de cualquiera que se me acerque con un kleenex lleno de manteca... uno nunca sabe...
Hola! Primera vez en tu blog, pero me ha gustado y me tomé la libertad de linkearte desde el mío para visitarte más seguido. Espero que no te moleste. Saludos
Publicar un comentario
<< Home