Esta tarde, fui a dejar a la mayor a su primera pijamada. Y si, con TODO el dolor de mi alma.
Pero pues trata de explicarme: ma nomás estará la mamá y la abuela, ma, llevaran Karoeke, ma llevaremos películas, por cierto, ¿me dejas llevar Narnia?, andale, ma, andale!
Ma se convence, se da cuenta que no siempre ella tiene que hacer lo mismo que sus padres. Un poco de libertad es bueno a esa edad. Claro, siempre y cuando se conozca ala familia, el número de teléfono de la casa y se sepa que esta, cuenta con extinguidotes y que las nenas no tendrán libre acceso al Internet.
Ma sabe que esta noche, no estará con ella para recordarle que no debe poner los codos en la mesa y que deberá cepillarse los dientes antes de dormir, no.
Esta noche Fernanda se recostara en alguna cama ajena, con sus mismos sueños, sin fantasmas que la acosan y la hacen distorsionar su carita.
Fernanda crece y ayer su ma (al subirse al coche y verla bailar de lejos con sus amigas), se dio cuenta de eso.
A ma, le queda satisfacción de haberla abrazado minutos antes, de haberla apretado fuerte, fuerte y decirle quedito: te amo.
Si, porque ma se da cuenta, que no siempre tiene uno que hacer, lo mismo que sus padres.
Sino lo que el corazón le dicta.